Este material, que anteriormente era considerado basura, hoy se encuentra en proceso de transformación en compost, contribuyendo a cerrar el ciclo de los residuos y dar nueva vida a los desechos orgánicos. Esta acción concreta representa un paso firme hacia la construcción de un barrio más consciente, sustentable y comprometido con el cuidado del planeta.
“Estamos convencidos de que la sustentabilidad se construye colectivamente, y lo que hemos logrado es una muestra del poder de la colaboración entre comercio local y sus restaurantes”, destacó Marcelo Leyton, Presidente de la Asociación Gremial Barrio Plaza Ñuñoa, impulsora de esta iniciativa.
Este avance es parte del trabajo sistemático que el barrio viene desarrollando en materia de gestión sustentable, y reafirma el compromiso de sus locatarios con una economía circular y una ciudad más limpia y habitable.
El desafío continúa: cada semana se seguirá recolectando residuos orgánicos, transformando lo que antes era desperdicio en oportunidad. Porque en Barrio Plaza Ñuñoa la sustentabilidad no es una moda, es un camino que elegimos recorrer juntos.